Facial Index es una preciosa tienda de gafas en pleno Soho newyorkino. Entre sus principios están el ofrecer una colección moderna, variada y considerar las gafas no solo como herramientas para el ojo, sino como un accesorio más que añadir a nuestra imagen y al que debemos dar por tanto cierta importancia.
Su exterior no puede ser más sobrio. Rótulos, carteles o cualquier otra señalización son innecesarios, pues desde la calle podemos contemplar todo el local y ver prácticamente toda la colección.
Facial Index is a precious glasses store in New York’s SoHo district. Among its principles are to offer a modern, varied collection and consider the glasses not only as tools for the eye, but as an accessory to add to our image and which deserves some importance.
Its exterior is absolutely sober. Signs, posters or any other signs are unnecessary, because from the street we can see the entire local and see virtually the entire collection.
En el interior rigen los mismos principios. Su intención es ofrecer un entorno tranquilo donde el cliente pase un rato relajado. Priman la sencillez y la elegancia. Las gafas se exponen en unas mesas de metacrilato en el centro del local y en una serie de sencillos expositores colocados a los lados, que sirven a su vez de almacenaje. Lo único que parece fuera de lugar en esta ambientación es un sofá de peculiar tapicería, pero que aporta a su vez un toque de color que entre tanto gris dialoga con las tonalidades de algunos de los productos.
The same principles are applied in the interior. It is intended to provide a tranquil environment where the clients have a relaxed time. They prevail simplicity and elegance. The glasses are set out in tables of methacrylate in the center of the premises and in a series of simple exhibitors placed at the sides, serving at the same time as storage. The only thing that seems out of place in this setting is a peculiar upholstery sofa, but that in turn brings a touch of color to all this grey and converses with some of the products tones.
